Actualmente hablar de conceptos como fraude, extorsión, chantaje o engaño implica hablar de ciberdelincuencia. Estos conceptos son cada vez menos presenciales y más digitales. Los ciberdelincuentes se adaptan a la temporalidad de diversas situaciones; por ejemplo, en 2020 y 2021 sus esfuerzos se centraron en la pandemia mundial, atacando a farmacéuticas, laboratorios y proveedores relacionados con este problema, lo que les permitió ocultarse entre la marea de información para pasar desapercibidos.
En general es posible que un ciberdelincuente pueda atacar de muchas formas, pero existe un modus operandi en común que sedarán descrito en 5 pasos más frecuentes: